Routine

(English below)
Dibujados con tiza sobre el suelo tres distancias de la proxémica del antropólogo Edward T.Hall ,que describen las distancias medibles entre las personas mientras éstas interactúan entre sí, se invita a dos personas a situarse espalda con espalda y a recorrer el mayor de los círculos sin mayor instrucción que evitar pisar fuera de la línea. Después se les invita a repetirlo en los consiguientes círculos.
Se invita a pasar del Espacio público al Espacio habitual y de ahí al Espacio de interacción en tres tiempos. El último espacio, el corporal queda en manos de los que realizan la performance.
Es especialmente interesante el momento en el que ellos se encuentran frente a frente y deben cruzarse, tienen que negociar mediante un dialogo corporal cómo hacerlo. Lo que marca una diferencia en las rutinas de la vida cotidiana son las personas que nos acompañan o con las que “nos cruzamos”
En el círculo perfecto las prohibiciones sociales externas se representan y normalmente no son cuestionadas. No hay que “salirse de la raya”.
Estos círculo se van desgastando con el proceso y el tiempo y hace que quien realiza la performance los siga sólo por memoria visual o física. Estos espacios definidos por los antropólogos de una manera científica se vuelven borrosos.
Por último decir que una vez más el artista no es el genio creador que debe ser venerado, simplemente me presento como el catalizador de la situación.

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Drawn with chalk on the ground the three distances from the anthropologist Edward T. Hall's proxemy, which describe the measurable distances between people as they interact with each other, two people are invited to stand back-to-back and to walk along the largest circle without Greater instruction than to avoid stepping outside the line. Then they are invited to repeat it in the subsequent circles.
It is invited to move from the Public Space to the Social Space and from there to the Personal Space in three times. The last space, the Personal Space depends on those who perform the performance.
It is especially interesting the moment in which they are face to face and must cross, they have to negotiate through a corporal dialogue how to do it. What makes a difference in the everiday routines are the people who accompany us or with whom we "cross"
In the perfect circle external social prohibitions are represented and usually are not questioned. Do not "get out of line".
These circles are being washed away with process and time and makes the performers follow them only by visual or physical memory. These spaces defined by anthropologists in a scientific way become blurred.
Lastly, once again the artist is not the creative genius that should be revered, I simply present myself as the catalyst of the situation